Después de tres meses con el horario de invierno, el pasado sábado los relojes se adelantaron una hora para darle la bienvenida al horario de verano.
Para muchos, el cambio de horario que vivimos el pasado sábado podría tener un efecto negativo en sus patrones de sueño. Para uno de cada tres adultos con problemas para dormir, perder una hora adicional de sueño puede tener un efecto perjudicial en su rutina.
Durante los próximos meses los períodos de oscuridad en nuestro día serán más cortos, por lo que se pueden presentar trastornos en los períodos de vigilia y sueño cuando se presentan excesos en las actividades diarias y no se cumplen los tiempos de descanso nocturno de acuerdo a la edad.
Para que esta semana logres acomodarte a los nuevos períodos de luz y oscuridad, sigue los siguientes consejos:
Consejos
- Esta semana, refuerza aquellos hábitos del sueño que tengas, como tener un horario fijo tanto para ir a acostarte como para levantarte.
- No uses dispositivos electrónicos antes de dormirte; la luz que emanan las pantallas hacen que tus niveles de melatonina disminuyan y te cueste más conciliar el sueño.
- Ten una comida liviana al menos una hora antes de acostarte, y evita el consumo de líquidos después de las 20:00 hrs.
- Si parte de tu rutina es dormir una siesta, evita que sea de más de una hora.
- Es importante seguir con una rutina normal y no pretender hacer cambios drásticos, siempre favoreciendo el período de actividad y de descanso para evitar enfermedades.